Los líderes internacionales se han reunido en la emblemática Plaza de la Revolución de La Habana, donde a ha arrancado el acto oficial de despedida del expresidente de Cuba y líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, que murió el pasado viernes a los 90 años.
Javier-López
Las sombras de tan larga dictadura son tan profundas que es imposible ver ya aquellas hogueras de Sierra Maestra donde comenzó todo. Se han quedado demasiado frías y no dan calor. Se han consumido a la par que el largo puro de Fidel Castro. El dictador forma ya parte del pasado pero esta semana entre funeral y funeral hemos escuchado otros datos que se nos han pasado desapercibidos, como los que afectan , por ejemplo, a una juventud sin trabajo ni horizontes.
Será esta una semana de funerales y homenajes por todo el país. Cuba espera con expectación lo que pueda ocurrir a partir de ahora que el máximo símbolo de la Revolución ha desaparecido, pero el fallecimiento de Fidel Castro es vivido de manera muy distinta por las nuevas y las viejas generaciones de cubanos.
Remontar el cauce de la revolución cubana es el itinerario de una traición perpetrada a lo largo de casi cinco décadas. Entre riberas afiladas por la violencia, la delación y la mentira, sus aguas discurren viscosas y dejan tras de sí la turbidez de una estela sin fin de dolor y frustración. Cuba es una isla deshecha, varada como uno de esos petroleros soviéticos que yacen sin vientre en medio de la estepa desértica que es ahora el Mar de Aral. Apagadas hace tiempo las hogueras de la leyenda, Cuba permanece aletargada, sumida en la penumbra de un crepúsculo sin majestuosidad ni colorido.
El régimen castrista tiene un largo historial de ejecuciones, desapariciones, asesinatos extrajudiciales, opresión a la disidencia así como a los periodistas, que tratan de ejercer el derecho fundamental a la libertad de expresión.
Yoani Sánchez
La isla ha vivido demasiados duelos como para vestirse con el color de la viudez. Tal vez habrá lágrimas y nostalgia, pero el legado de Fidel se irá apagando. Quienes tenían menos de 15 años en 2006, apenas recuerdan su voz
Con la muerte de Fidel Castro desaparece totalmente el tipo revolucionario que basa su estrategia en el asalto al Poder y la conquista total de todos los resortes sociales, políticos y económicos de forma inmediata. Fidel Castro ha muerto con su revolución fracasada y zozobrante, pactando ultimamente con el populismo chavista de mismo modo que estuvo durante décadas a la sombra del imperio soviético.
El líder cubano Fidel Castro ha muerto a los 90 años de edad, informó hoy su hermano, el presidente Raúl Castro, en una alocución en la televisión estatal.