Esa hoja de ruta anunciada por el actual líder del PSOE ha causado gran indignación en el equipo de Susana Díaz, cuyas aspiraciones de relevar a Sánchez se ven ahora bloqueadas. Según explican a El Confidencial Digital dirigentes socialistas andaluces muy próximos a la presidenta de la Junta, las primarias de octubre son una maniobra del madrileño para neutralizar a la andaluza.

Estas mismas fuentes explican que la campaña de las primarias coincidirán con el debate sobre el estado de la región en Andalucía, que Díaz planeaba para el próximo 19 de octubre. De esa forma, “Susana no puede estar preparando su posible candidatura cuando está exponiendo en el Parlamento andaluz su acción de gobierno al frente de la Junta”.

En ese sentido, añaden desde el entorno de Díaz, Sánchez quiere descartar a su gran rival de cara a esas primarias a la secretaría general y, de paso, tomar ventaja sobre otros posibles competidores: “Las fechas las ha elegido para garantizarse una victoria que le permita eliminar a los elementos críticos de la actual ejecutiva y poder decidir a sus anchas”.

El resto de barones, también bloqueados

La celebración de elecciones primarias el 23 de octubre también dificulta las aspiraciones que podían tener otros barones del partido, como Guillermo Fernández Vara, Javier Fernández o Emiliano García-Page.

En esas fechas, se estarán debatiendo en las diferentes cámaras autonómicas las propuestas de Presupuestos para 2017, por lo que ninguno de ellos puede permitirse, en ese momento, dar el paso para intentar desbancar a Sánchez al frente de Ferraz.