A través del 88.6 de la FM y de la web m21radio.es echará a andar el lunes la radio municipal que el Gobierno de Manuela Carmena ha querido reactivar. Criticada por el Partido Popular y Ciudadanos, este nuevo medio de comunicación tendrá, según precisó ayer la portavoz municipal, Rita Maestre, un director temporal. El elegido para esta responsabilidad es Jacobo Rivero, director de Comunicación y Gestión de Medios de Madrid Destino. Según Rivero reconocía ayer que para la puesta en marcha de M21, su equipo y él han «buceado en muchas de las radios municipales actualmente en antena y nos han fascinado proyectos como el de Barcelona o el de Nueva York. Son radios que cuentan con muchos años de rodaje y que gozan de independencia y credibilidad».

Maestre, en su comparecencia de prensa posterior a la Junta de Gobierno, también insistió en que el Gobierno municipal no tiene ninguna intención de potenciar el perfil político o ideológico de la radio. «No serán tertulias políticas disfrazadas de información pública. Tampoco habrá tertulianos afines porque pensamos que el dinero de los madrileños se puede utilizar mejor», señaló la portavoz. Estas palabras llegan sólo unos días después de que el portavoz adjunto del PP en el consistorio, Iñigo Henríquez de Luna, denunciara que la radio se convertirá en «un instrumento de propaganda».

El carácter eventual del director de M21 coincidirá previsiblemente con una fase de transición –Maestre la fijó ayer en torno a los nueve meses– durante la cual la emisora emitirá en pruebas y en la que se la dotará de estructura jurídica. En el pleno de la ciudad que se celebra el próximo miércoles se darán pasos precisamente en esta línea. Una propuesta del PSOE que plantea la creación de un estatuto y una comisión de seguimiento para esta radio-escuela saldrá adelante ese día con los votos favorables de los nueve ediles socialistas y de los 20 deAhora Madrid. Hasta la celebración del Pleno, ambos grupos perfilarán detalles de la iniciativa, como, por ejemplo, la composición de la comisión de seguimiento, en la que podrían integrarse los grupos de la oposición o profesionales del medio designados por las formaciones políticas.

El rescate de esta emisora se ha producido gracias a una inversión de 723.580 euros. El presupuesto anual será de un millón de euros.