sábado, 20 de abril de 2024 00:01h.

Purga en Podemos

Dispuesto para la purga: Iglesias advierte que no quiere pactos con Errejón

Pablo Iglesias e Iñigo Errejón caminan hacia una confrontación abierta de sus proyectos políticos en el segundo congreso de Podemos, previsto para principios de 2017. El secretario general de Podemos ha retado a su número dos a dar un paso al frente y plasmar sus tesis en un proyecto político distinto al suyo, para que los militantes conozcan cuáles son sus «diferencias» y así poder «decidir» por uno u otro.

false

Tras las duras elecciones primarias de Madrid, en las que los afines a Iglesias y a Errejón midieron sus fuerzas, con victoria de los primeros, el secretario general se siente más reforzado que nunca en sus planteamientos y «enormemente apoyado» para seguir liderando el partido.

Por ello, ayer rechazó expresamente cerrar un acuerdo «por arriba» o «precocinado» con Errejón para conseguir una «síntesis» de ambos proyectos. Así lo habían reclamado los últimos días voces de peso como Pablo Echenique, con el objetivo de evitar una nueva batalla entre los dos máximos referentes de la formación.

En esa idea estaba de hecho trabajando el propio Errejón, que suscribió la petición de Echenique para buscar un acuerdo y que una parte de Podemos no se tenga que «imponer» sobre la otra.

Sin embargo, Iglesias ha decidido congelar la posibilidad de negociar con Errejón. Su explicación es que el debate interno no se puede resolver «con pactos entre dirigentes», sino únicamente con los votos de los militantes de Podemos. Esto aumenta las posibilidades de llegar al llamado congreso de Vistalegre II con Iglesias y Errejón enfrentados.

Lo que se desliza de las palabras del secretario general de Podemos es que quiere empujar a Errejón a salir de su ambigüedad sobre la ruta política para retratarse ante los simpatizantes, para que estos puedan conocer cuáles son las diferencias entre ambos. Puede ser redactando un documento propio o explicando detalladamente cuáles son sus tesis y en qué difieren de Iglesias.

Cuando cada una de las partes haya definido su postura, Iglesias sí está dispuesto a abrirse a la posibilidad de «transaccionar» ideas, según las fuentes consultadas. Es una fórmula que los pablistas ya utilizaron en las primarias de Madrid para cerrar una alianza con el sector Anticapitalista del partido, que a la postre fue esencial para derrotar a los errejonistas. Entonces, Escucha Podemos (afines a Iglesias) y Reinicia Podemos (anticapis) pusieron sobre la mesa cuáles eran sus planteamientos de partida. A partir de ahí buscaron los puntos de acuerdo. El ejemplo sirve para ilustrar lo que se plantea ahora. Que Iglesias y Errejón se definan y luego, en base a eso, exploren si hay posibilidad de encajar sus tesis.

Por tanto, a día de hoy no parece posible que el debate del congreso de Podemos arranque con un solo documento político firmado por los máximos dirigentes del partido, como sucedió en 2014 en el congreso fundacional de Vistalegre.

«A veces es una buena noticia ponerse de acuerdo en los documentos, pero a veces puede ser una mejor noticia incluso que diferentes propuestas, no dos, sino cuatro, cinco o seis, permitan a los inscritos decidir», advirtió ayer Iglesias, quien recalcó que aunque él es «partidario de los acuerdos», eso «nunca» puede hacerse «robándole el debate a la gente ni dándole soluciones precocinadas por arriba que no le permita debatir ni decidir». En todo caso, entiende que debe «esforzarse» para que en su proyecto haya «sitio» para «todos».

Por su parte, los movimientos que está haciendo Errejón hacen pensar que no va a rehuir la confrontación con Iglesias. El lunes asumió «el reto» de «defender un Podemos popular y ganador» que, ante todo, sea capaz de ampliar su espacio electoral en lugar de encerrarse en posiciones radicales.

En este sentido, la conjura que hacen los afines a Errejón es que tienen que cambiar la estrategia para ser «más claros» en sus planteamientos y buscar una confrontación «más directa» a la hora de plantear sus «ideas».