jueves, 28 de marzo de 2024 10:01h.

La clave está en las caderas

 

Un estudio refleja cuáles son los movimientos de baile femeninos mejor valorados y por qué

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ABC

La danza es un comportamiento humano universal relacionado frecuentemente con lo que los científicos llaman «situaciones de cortejo». No tiene una función de supervivencia inmediata, pero parece que estos contoneos más o menos acompasados pueden servir para hacerse notar y atraer a potenciales parejas. ¿O es que alguien desconoce lo que pasa en una pista de baile? Claro que no todo el mundo se mueve igual, hay quien apenas arrastra los pies hacia uno y otro lado y quien parece fluir con la música. Sin llegar a esos extremos, investigadores de la británica Universidad de Northumbria han estudiado cuáles son los movimientos del baile femenino más apreciados y por qué. Los autores encontraron que las mujeres que menean mucho las caderas y realizan movimientos asimétricos con los muslos y los brazos son valoradas como mejores bailarinas. El motivo, cómo no, puede estar relacionado con el apareamiento y la continuación de la especie.

Como explican los autores en su trabajo, publicado este jueves en Scientific Reports, los rasgos que atraen al sexo opuesto han sido muchas veces objeto de investigación. Sabemos mucho sobre lo que es atractivo en distintos rasgos físicos, incluyendo la apariencia facial, la forma del cuerpo y las cualidades vocales, y sobre cómo esas características ayudan a identificar a la pareja que puede proporcionar beneficios reproductivos. Sin embargo, cómo y por qué el baile resulta atractivo ha sido menos estudiado. A partir de sus movimientos, las mujeres pueden asignar a bailarines masculinos rasgos de la personalidad socialmente deseables, como la extraversión, la seguridad o la estabilidad emocional. En las mujeres, hay algunas pruebas de que el baile puede reflejar fertilidad: la danza de las mujeres se considera más atractiva durante los períodos de alta fertilidad, y se sabe que las bailarinas eróticas ganan más propinas durante la ovulación.

El equipo de Northumbria se centró en la danza de las mujeres. ¿El motivo? Ellas bailan para entretener a los hombres en muchas culturas y, al parecer, un estudio en un club nocturno encontró que las bailarinas eran más propensas a atraer la atención masculina que viceversa, al tiempo que ellos prestan más atención visual a las bailarinas atractivas. Con este propósito, los investigadores registraron a 39 mujeres mientras bailaban a un ritmo básico proporcionado por los golpes de una batería. Esos patrones de movimiento fueron reproducidos por unos avatares de ordenador, reteniendo de esta manera sus movimientos distintivos, pero eliminando toda la información acerca de su apariencia individual. Después, pidieron a 57 hombres y 143 mujeres que evaluaran la capacidad de baile de cada uno de los 39 avatares en imágenes de vídeo de 15 segundos.

Los autores encontraron tres tipos de movimientos que contribuían a que la danza femenina fuera mejor valorada (En el vídeo de arriba, un baile bien valorado; en el de abajo, mal valorado). Las clasificaciones más altas fueron adjudicadas a los bailes que implicaban una mayor oscilación de la cadera, movimientos asimétricos de los muslos y un nivel intermedio de movimientos asimétricos de los brazos, en comparación con el resto de la muestra.

Según el estudio, los movimientos que distinguen a las bailarinas de alta calidad pueden tener un significado funcional. Por ejemplo, la oscilación de la cadera puede ser un rasgo enfáticamente femenino, mientras que la capacidad de mover las extremidades independientemente una de la otra, puede dar fe de un control motor bien desarrollado, siempre y cuando esta independencia de las extremidades no se convierta en un descontrol patológico. En resumen, el baile puede dar pistas sobre el atractivo de una persona como pareja sexual.