viernes, 19 de abril de 2024 15:02h.

Debate sobre la SS

Seguridad Social, caminando al filo de lo imposible

La mejoría del empleo este año no ha logrado frenar el déficit de la Seguridad Social. A pesar del medio millón de puestos de trabajo creados en los nueve primeros meses del año y de un crecimiento de la economía rondando el 3% anual, el sistema cerrará este ejercicio con un agujero de 18.812 millones de euros, un 43% mayor que el récord con el que cerró el ejercicio 2015.

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Una de las cuestiones en las que se refleja la lentitud de la recuperación de los cotizantes en relación al rápido crecimiento de los pensionistas es que, pese al incremento del empleo, el ratio de cotizantes por pensionista apenas ha mejorado. Según los datos del Ministerio de Empleo, este ratio está muy cerca de sus mínimos desde el año 2000. En septiembre, se situaba en 2,27 (lo que significa que 2,27 cotizantes sufragan una pensión en vigor), con lo que apenas había mejorado dos centésimas desde que marcó mínimos en 2014 y 2015.

Además, la nómina de las pensiones no sube sólo por el incremento del número de pensionistas, sino también porque las pensiones en vigor son mayores que antes. La pensión media es ahora de 906,37 euros, lo que supone un incremento del 1,9% respecto al año anterior. Si se compara con el nivel de hace diez años, el aumento es del 40%.

No obstante, este crecimiento del gasto en pensiones está en línea con lo presupuestado y son otros gastos menos esperados los que también están deteriorando las cuentas del sistema. Es el caso de las bajas laborales, que crecerá a un ritmo del 12 % este año y podrían exigir una ampliación del crédito presupuestario.

Los ingresos, a años luz del presupuesto

Pero es sin duda en el lado de los ingresos en el que la Seguridad Social está encontrando más imprevistos. Las cotizaciones sociales deberían crecer a un ritmo del 16% respecto al año pasado para ajustarse al objetivo marcado en el presupuesto, pero lo están haciendo a un ritmo del 2,8%. Y todo ello hace que, aunque España haya recuperado la ocupación que tenía en 2009, sus cotizantes aportan 5.000 millones de euros menos a la Seguridad Social.