El Apple Pay llega hoy a España de la mano del Banco Santander. Se trata del quinto país de Europa en hacerlo, adelantándose a sus vecinos alemanes o italianos, entre otros. El motivo por el que España goza de especiales simpatías para el gigante de la manzana se debe al generoso parque de terminales de punto de venta (TPV) con tecnología de contactless (sin contacto) desplegado en todo el país, que abarca a las tres cuartas partes del total.

Jennifer Bailey, vicepresidenta de Apple, destacó ayer en un encuentro con elEconomistala importancia de España como enclave estratégico para su compañía con vistas al desarrollo del Apple Pay, servicio que hasta ahora sólo se disfruta en otros doce países del mundo, cuatro de ellos europeos: Reino Unido, Francia, Suiza y Rusia.

Como sucede en otras partes del mundo, el servicio de pago de Apple también estará al alcance de los usuarios de American Express, las tarjetas Carrefour y Edenred. De esa forma, los clientes y usuarios de tarjetas de crédito o débito de las referidas compañías -y que dispongan de versiones recientes de iPhone, iPad, Apple Watch o MacBooks con Touch ID-, ya pueden abonar sus compras a través del móvil, tableta o reloj en más de 800.000 establecimientos españoles.

La operativa de pago es muy sencilla. Basta con acercar, por ejemplo, el smartphone al TPV del establecimiento comercial para abonar la transacción de forma rápida, segura y con la máxima privacidad.

Según explican fuentes de Apple, no se requiere despertar el móvil, ni tampoco abrir ninguna aplicación, ya que la conectividad NFC del TPV activa el sistema para el pago sin más requerimiento que el reconocimiento dactilar que realiza el usuario para utilizar el móvil. Al instante, el TPV reconoce la cuenta de Apple Pay debidamente acreditada y procede a facturar la compra.

Entre otros detalles, el establecimiento no tiene acceso a los números de las tarjetas asociadas al móvil, ya que Apple únicamente ofrece una clave numérica específica (una cifra encriptada asociada a la tarjeta y al dispositivo) que acuerdan el fabricante y el Santander para estos fines. De esa forma, cada transacción se autoriza con un código de seguridad dinámico que sirve para ese único pago.

Compras online

Junto a las tiendas con TPV contactless, Apple Pay también sirve para adquirir apps y para efectuar compras en las tiendas online que vayan incorporando la nueva pasarela de pago. En esos casos, se debe autorizar la compra con la huella dactilar, pero sin teclear los números de la tarjeta que se requiere en los sistemas de pago online tradicionales.

Antes de realizar las compras con Apple Pay, el usuario debe acudir a la aplicación Wallet (ya instalada en todos los dispositivos iOS) y allí incorporar la tarjeta o tarjetas de crédito o débito del Santander, American Express, Carrefour y EdenRed que pretenda utilizar. Basta con tomar una fotografía de la tarjeta con un visor especial que ofrece Wallet y, acto seguido, incorporar una clave numérica que proporcionará el banco por medio de SMS o email.

Ese trámite solo se realiza una vez. De esa forma, el pago funcionará al aproximar el reloj, móvil o tableta al PTV. Además, toda la información de las compras queda almacenada en un chip del iPhone, pero nunca en los servidores de Apple, explican en la compañía.

Con este acuerdo, Santander es la única entidad que ofrece el pago móvil a todos sus clientes, tanto en la plataforma Wallet de Android como en el Apple Pay de iOs. En la actualidad, el Santander tiene casi 3 millones de clientes digitales, de los que 1,3 millones son usuarios de banca móvil. De estos últimos, un tercio usa iPhone, una cuota comparativamente muy alta, explicaron ayer fuentes de la entidad.